Media Noche (Privado)

Escuchaba por la ventana el sonido de la lluvia caer fuertemente, alguna vez habia truenos y en uno especialmente fuerte escucho a varias chicas gritar. Rodo lo ojos ¡Eran truenos nada mas! Aunque se le hacia extraño que estuviese lloviendo. Suspiro, mientras guardaba el archivo.

Y justo a tiempo, por que la luz se fue y su laptop se apago, a pesar de que fue repuesta por lo que seguramente era una fuente interna de energia soo para la academia

Dejo la laptop al lado de su cama con cuidado, en una mesilla, se tapo con las sabanas acostandose, se abrazo de una almohada con una curiosa forma a sandwich, y se dispuso a dormir

Se había quedado paseando por las instalaciones a altas horas de la noche para evitar toparse con su compañera de cuarto, le había comentado que era realmente... especial a su estilo. En lo que escuchó un trueno se sobresaltó dejando escapar un pequeño grito por sus labios, el cual, era ahogado por otros mucho más fuertes.
Continuó caminando hacia el piso de los dormitorios de 2do, apurando paso hacia su habitación. De un segundo a otro, la luz se esfuma de las instalaciones, dejándole en la completa oscuridad; a ciegas, buscó la puerta más cercana a ella, al encontrar la manija trató de girarle pero estaba con el pasador puesto. Suspirando, tocó la puerta sin más remedio.

Salto al escuchar que alguien tocaba poco despues de un rayo. Prendio la luz de la mesa de noche, ilumninando teunemente el camino que debia seguir, bajando de la cama y abriendo la puerta, para encontrarse con una chica rubia que habia visto en otra parte

Pronto, se acordo

- ¿Lily? -Pregunto, perpleja, mientras se hacia a un lado- ¿Estas bien? -Volvio a cuestionar, prendiendo la luz del techo, de forma que el cuarto se ilumino por completo

- ¡P-perdona, me he equivocado de cuarto! -Manifestó con los ojos un poco llorosos, odiaba admitirlo, pero le tenía cierto miedo a la oscuridad por la gran inseguridad y poca visión que ésta le otorgaba.- Siento haber molestado -Hizo una reverencia bajando la cabeza muy apenada por el error que acababa de cometer.

La observo, y poco tiempo tardo en darse cuenta que estaba asustada. Suspiro y la tomo del brazo, esa chica le provocaba una especie de sensacion de proteccion para con ella

- ¿Estas bien? -Repitio, quitandole las lagrimas de los ojos, mientras cerraba la puerta, alejandola de la oscuridad del pasillo- Recuerda que quedamos que si tenias miedo podias venir aca, asi que no te preocupes -sonrio

- Algo, no es para tanto. -Comentó sollozando sintiéndose culpable de que Maria tuviera que cargar con el peso de su miedo.

Entró al cuarto de la otra chica para tomar asiento en su cama, encontró un poco curiosa una almohada, tenía forma de un adorable y delicioso sandwich, no dudó en cogerlo y abrazarlo con todas sus fuerzas tratando de alejar el miedo de ella por un poco de calidez.

- Es muy amable de tu parte proponerme tu ayuda, pero... Me temo que soy algo miedosa.